viernes, 8 de agosto de 2008

08/08/08

...hoy, como siempre, he pensado en mil cosas a la vez...
...los sesenta segundos que necesitas para saber si alguien es de los tuyos...a veces incluso menos...
...la tonta sensación de libertad que sientes cuando te quitas el reloj...
...la ropa tendida, el aire por la tarde, las canciones que cuentan historias...
...y, como tantas otras veces, he pensado en los límites...


...tu límite sólo lo puedes marcar tú...y cuando llegas a ese punto en el que crees que ya no das más, siempre puedes correr un kilómetro más, siempre puedes subir un metro más...pienso que la cabeza se bloquea un poco antes de que el cuerpo diga basta...el límite personal no lo conoce ni uno mismo...pienso también en el poder de la cabeza...una vez me dijiste, "no siempre llega el más fuerte, sino el que piensa mejor"...siempre he intentado pensar mejor...ahora es cuando empiezo a pensar mejor, y también el cuerpo responde mejor...pero también he empezado a entender las señales de alarma, esas que saltan cuando rozas el límite insano...y creo que eso me hace más fuerte también...

...en el recuerdo esos días de agosto en los que se respira bien, días de sudor brillante y sonrisas sinceras, días de hablar sin complejos, días de sentir, como en pocas ocasiones, que aún quedan gatos en el mundo...

...a veces te la juegas...y ganas...

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