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...cuando nos conocimos, yo venía de ganar siempre, y tú de aceptar que no ibas a ganar nunca más...cuando nos conocimos, yo no sabía hasta dónde era capaz de sufrir, y tú ya veías que era imposible soportar tanto dolor...cuando nos conocimos, la vida se limitaba a sacar adelante una carrera universitaria, a trabajar de azafata, a entrenar a horas intempestivas, a ir en moto hasta el rompeolas a escribir versos inconexos, a viajar a lugares extraños, a leer libros rebuscados...cuando nos conocimos yo era un gato al sol que ansiaba comerme el mundo, y tú un niño que me hacía sonreir...cuando nos conocimos, Jorge cantaba "viejo a los veintitrés", y ahora dice "aunque pasemos de los treinta y las derrotas sean eternas"...

...hoy es un día par de un mes par...terrible por definición...y me han dicho que parecía un aguacate...y eso me ha hecho sonreir...será que no vale la pena tomarse los reveses tan a pecho...

...hoy he pensado mucho en las cosas que he dejado atrás, y en las cosas que han de venir...he ideado un plan perfecto para evitar esas grandes desgracias que nos unan...la lástima es que ahora tengo demasiado sueño como para empezar a poner mi plan en marcha...

...cuando llegue el buen tiempo iremos a la búsqueda de esa gran pared que nos devuelva al lugar del que nunca debimos salir...si quieres, puedes venir conmigo...te garantizo sonrisas y una vista espectacular...

...nunca pude prometerte nada más allá de mi amor en el instante preciso en que las palabras fluían de mi boca...y nunca podré prometerte nada más allá de hoy, aquí y ahora...intentar enjaular el viento, intentar atrapar la brisa entre las manos...eso nunca sería posible, lo sabes más allá del raciocinio y el deseo...elegí las nubes como casa y los sueños como destino vacacional, elegí quererme antes que odiar al resto del mundo, elegí ser yo antes que convertirme en un producto en serie...tal vez nunca llegue a ser una mujer perfecta, con la casa ordenada y un horario que me permita preparar la cena...tal vez nunca llegue a ser una mujer convencional, digna de un marido convencional, viviendo de una forma convencional y complaciendo así a ese entorno que desea "lo mejor para ti"...no, no soy perfecta, vivo en el desorden y baso mi vida en pequeñas victorias sobre grandes batallas, pero, cuando me miro al espejo, estoy segura de que, al menos, a mi no me fallo...